CASTELLÓN. El Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) ha adjudicado a IPROMA el control y la explotación de la red de control de sustancias peligrosas en las aguas superficiales de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).
Un encargo que significará que IPROMA tendrá que realizar labores de control de la calidad del agua de los ríos que forman parte de la demarcación de la CHJ con el fin de poder localizar los posibles focos de vertidos de aguas residuales.
Esta actuación también incluye labores de estudio y análisis de actividades industriales o agrícolas que puedan ser responsables de la introducción de sustancias peligrosas en el medio acuático.
Labores que han sido encomendadas a la sede central de IPROMA en Castellón que actuará de manera conjunta con la oficina técnica que la empresa tiene en Valencia para poder desarrollar un trabajo adecuado a las necesidades que solicita el MARM.