El Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención, aborda las especialidades de la PRL en cuatro campos distintos: seguridad en el trabajo, higiene industrial, medicina del trabajo y ergonomía y psicosociología aplicada. El objetivo es llevar a cabo una prevención integral y garantizar que la salud de los trabajadores no se vea comprometida por el desempeño de su trabajo. Según la normativa, estas especialidades solo pueden ser desempeñadas por aquellos que tengan una formación de nivel superior, la cual requiere una titulación universitaria oficial y cursar una formación mínima, acreditada por una universidad, de una de las especializaciones indicadas en el anexo IV de la legislación.
Seguridad en el trabajo
Es la especialidad preventiva más técnica, ya que actúa sobre el entorno físico del trabajador con la finalidad de disminuir el riesgo de daños y accidentes a través de:
- Aplicación de medidas.
- Desarrollo de actividades.
- Labores formación e información.
- Aplicación de técnicas y procedimientos.
Mediante la prevención de riesgos laborales, se establecen una serie de normas y técnicas que garantizan que los trabajadores desarrollen su trabajo bajo condiciones óptimas de seguridad. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los accidentes que suceden en el entorno laboral son provocados por el factor humano, por eso es muy importante realizar un trabajo de formación e información acerca de cómo deben aplicarse los procedimientos de trabajo y la prevención de accidentes.
Los técnicos PRL aplican la especialidad de seguridad en el trabajo a través de la identificación, evaluación y control de riesgos específicos asociados a las actividades laborales en el uso de:
- Máquinas.
- Equipos, instalaciones y herramientas.
- Lugares y espacios de trabajo.
- Manipulación, almacenamiento y transporte.
- Electricidad.
- Incendios.
- Productos químicos.
- Residuos tóxicos y peligrosos.
Higiene industrial
Es la especialidad preventiva tiene como objetivo mejorar las condiciones ambientales de los puestos trabajo para reducir el riesgo de enfermedad profesional a través de los siguientes métodos de actuación:
- Reconomiento.
- Evaluación.
- Control.
Algunos de los factores ambientales que pueden surgir en un lugar de trabajo y ocasionar molestias o daños a la salud de los trabajadores son:
- Agentes biológicos.
- Agentes físicos.
- Contaminantes químicos.
Para preservar la salud de los trabajadores, las empresas deben llevar a cabo muestreos y revisiones periódicas que permitan comprobar el nivel de agentes contaminantes en el ambiente, ya sea por parte de las propias empresas o de la compañía de prevención contratada. Después del análisis en laboratorio y del resultado obtenido en las muestras, se verifican los niveles de agentes potencialmente contaminantes que se encuentran en el ambiente laboral con el fin de adoptar las medidas necesarias para garantizar un entorno saludable a los trabajadores expuestos.
Medicina del trabajo
La medicina del trabajo es la especialidad PRL que se ocupa de la prevención de los accidentes en el trabajo y de las enfermedades profesionales a través del análisis de los riesgos asociados al desempeño de los trabajos y de la influencia del entorno laboral. Al mismo tiempo, estudia los medios preventivos que contribuyen a conseguir un mayor grado de bienestar físico, psíquico y social de los trabajadores.
La medicina del trabajo como especialidad preventiva, analiza y estudia a nivel individuar cada trabajador para:
- Conocer cuáles son sus condiciones físicas y de salud para determinar si son adecuadas para las exigencias del trabajo.
- Identificar las condiciones en las que se encuentra el trabajador en su puesto y si estas afectan a su salud.
- Evaluar la salud del trabajador en caso de haber sufrido un accidente y, si fuera necesario, determinar el tratamiento más conveniente.
El empresario tiene la obligación de garantizar a la salud de los trabajadores a través de un servicio de vigilancia y revisiones periódicas en función de los riesgos inherentes al puesto de trabajo, siempre y cuando los trabajadores presten su consentimiento.
Ergonomía y psicosociología aplicada
El objetivo de esta especialidad es la adecuación del puesto de trabajo y el entorno físico, mental y social del trabajador. En este sentido, podemos decir que su finalidad no es solo prevenir los efectos negativos sobre la salud, sino mejorar las condiciones del trabajo a través del confort y el bienestar.
El profesional PRL especializado en ergonomía y psicosociología aplicada estudia y analiza algunos de los siguientes factores para minimizar los riesgos derivados de los factores psicosociales:
- Estrés laboral.
- Puesto de trabajo.
- Carga mental.
- Funciones a desarrollar.
- Nivel de satisfacción laboral.
- Autonomía en el trabajo.
- Relaciones personales.
Recuerde que Eurofins EcoGestor llevamos a cabo nuestro servicio de EcoGestor LEGISLACIÓN apoyado por equipo multidisciplinar de consultores formado por técnicos superiores en prevención de riesgos laborales. Solicite ya y sin compromiso una demo gratis para conocer esta herramienta que le ayudará a identificar los requisitos legales de aplicación en materia PRL en una organización o centro de trabajo.