La Comisión está simplificando y eliminando normas y reglamentos de la UE para facilitar las actividades de las empresas y los ciudadanos y estimular el crecimiento económico.
La Comisión Europea ha presentado en octubre las medidas que adoptará en cada una de sus políticas para simplificar los textos jurídicos europeos, reducir la carga sobre las empresas y adoptar una normativa de más fácil aplicación.
El ejercicio se enmarca en el programa de adecuación y eficacia de la reglamentación (REFIT) adoptado por la Comisión. Para volver a situar a la UE en la vía del crecimiento y el empleo, hay que garantizar que su legislación se adapte a los objetivos que persigue.
En palabras del Presidente Durão Barroso, «Europa tiene que contribuir a buscar soluciones para los grandes retos a los que nos enfrentamos colectivamente. Sin embargo, para ser eficaces, debemos concentrarnos en las prioridades reales y aplicar una dosis adecuada de regulación. No todo lo que es bueno es bueno a nivel europeo. Reflexionemos antes de decidir dónde y cuándo actuar a escala de la UE.»
Este mensaje está en consonancia con la idea apuntada por el Presidente en su discurso del 11 de septiembre sobre el estado de la Unión: «La UE tiene que ser grande en las cosas grandes y más pequeña en las cosas más pequeñas».
A continuación, el Presidente añadió: «Con REFIT la Comisión ha puesto en marcha el ejercicio más exhaustivo hasta la fecha para aligerar y simplificar la legislación de la UE. Nuestra firme aplicación de los principios de subsidiariedad y proporcionalidad no pondrá en tela de juicio los importantes beneficios de la reglamentación europea para los ciudadanos y las empresas, y en particular de la normativa sobre la que se sustenta el mercado único. El programa REFIT proporciona una perspectiva pragmática para el futuro de la reglamentación de la UE, a solo unos cuantos meses de las elecciones europeas de mayo de 2014.»
Junto con sus planes, la Comisión ha publicado los resultados de una revisión de toda la legislación de la UE, en la que se define una amplia gama de medidas propuestas o en curso. Además, la Comisión anuncia que publicará un cuadro de indicadores para seguir los resultados a nivel nacional y europeo.
A PESAR DE LOS AVANCES, LAS PRIORIDADES REALES REQUIEREN MÁS ATENCIÓN.
Las pequeñas empresas se benefician de una amplia gama de medidas para reducir las cargas administrativas, como la facturación electrónica del IVA, las exenciones o los regímenes especiales en materia de contabilidad, residuos electrónicos y estadísticas comerciales, etc.
Entre 2007 y 2012 se redujeron en un 25% diversas cargas administrativas como la transmisión innecesaria de información y los requisitos de información superfluos. Con ello se espera que el PIB de la UE aumente un 1,4% (150.000 millones de euros).
Entre las principales reformas para simplificar la normativa y reducir costes destacan la introducción de una patente única en la UE, el desarrollo de un código aduanero europeo y la reducción de los costes de despliegue de la banda ancha.
También ha cambiado significativamente la forma en que la Comisión prepara la legislación, ya que ahora se presta una especial atención a las necesidades de las pequeñas empresas y se recurre sistemáticamente a los análisis de impacto, las evaluaciones y las consultas públicas.
EN PREPARACIÓN.
Entre las más de veinte iniciativas de reducción de la burocracia actualmente en estudio se incluyen medidas relacionadas con la seguridad de los productos de consumo y la salud animal.
En lo que se refiere a las empresas, la introducción de una declaración del IVA normalizada podría contribuir a reducir los costes.
Cuando finalice 2014, se habrán llevado a cabo cerca de 50 evaluaciones de las cargas reglamentarias en ámbitos como la seguridad y la salud en el trabajo, los trabajadores de empresas de trabajo temporal y la nueva normativa de la UE en materia de servicios financieros.
Por último, la Comisión desea retirar una serie de propuestas que se encuentran bloqueadas en el proceso legislativo y derogar determinados textos ya obsoletos.
COLABORACIÓN CON LAS INSTITUCIONES Y LOS GOBIERNOS DE LA UE.
El éxito del programa de adecuación normativa de la Comisión dependerá fundamentalmente de que las instituciones y los Estados miembros de la UE tengan el mismo nivel de ambición.
Se publicará un cuadro anual de indicadores con el doble objetivo de hacer un seguimiento de los progresos a escala nacional y europea y fomentar el diálogo entre los ciudadanos, los gobiernos, las empresas y la sociedad civil en general.