DECRETO 213/2012, de 16 de octubre, de contaminación acústica de la Comunidad Autónoma del País Vasco.
Este Decreto tiene por objeto establecer las normas para prevenir, reducir y vigilar la contaminación acústica, para evitar y reducir los daños y molestias que de ésta se pudieran derivar para la salud humana, los bienes o el medio ambiente, así como establecer los mecanismos para mejorar la calidad acústica ambiental en la Comunidad Autónoma del País Vasco. Se regulan además en el presente Decreto las exigencias necesarias para la protección acústica de las nuevas edificaciones.
Este decreto desarrolla y completa la regulación recogida en la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del Ruido y sus desarrollos posteriores sobre evaluación y gestión del ruido ambiental y zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones acústicas, que a su vez traspone al ordenamiento la Directiva 2002/49/CE, de 25 de junio de 2002, sobre evaluación del ruido ambiental.
Se pretende «clarificar conceptos de la legislación estatal», solventar «carencias», y establecer un modelo de gestión en esta materia a partir de las competencias de las diferentes instituciones implicadas con el objetivo de facilitar la gestión de la contaminación acústica en el País Vasco. El objetivo de estas medidas es mejorar la regulación para la prevención y la reducción de los efectos nocivos de la exposición al ruido ambiental.
Entre las novedades más destacables, se encuentra la definición del marco legislativo de aplicación para los focos de contaminación acústica de competencia autonómica y foral, incluyendo lo referido a la figura de ‘Zona de Servidumbre Acústica’ para las infraestructuras de transporte.
Además, se definen las condiciones acústicas mínimas que deben satisfacer los locales en los que se implanten actividades en suelo urbano residencial para evitar molestias a los ciudadanos y crear un marco legislativo de referencia para ayudar a la gestión de estas situaciones por parte de la administración local.
También se crea la Comisión Técnica de Evaluación Acústica del País Vasco, dentro de la actual Comisión Ambiental, con el objetivo principal de resolver discrepancias que puedan surgir en la gestión de «esta forma de contaminación de carácter trasversal en la que son varios los agentes y administraciones implicadas».