La Comisión Europea (CE) ha solicitado a España el adecuado cumplimiento de la normativa comunitaria sobre los residuos y, particularmente, sobre los vertederos. Esto podría implicar el cierre de las instalaciones de residuos que incumpliesen las directrices comunitarias.
La Unión Europea establece requisitos técnicos estrictos para los vertidos con el objeto de prevenir o reducir los efectos negativos sobre el medio ambiente y, en especial, sobre las aguas de superficie, las aguas subterráneas, el suelo, el aire y la salud humana en la Directiva 1999/31.
En virtud de la normativa de la UE, los Estados miembros deben velar por que los vertederos que habían sido autorizados o ya estaban en funcionamiento en el momento de la transposición de la Directiva 1999/31/CE del Consejo, de 26 de abril de 1999, relativa al vertido de residuos no sigan funcionando después de julio de 2009 a menos que cumplan la citada Directiva.
Según la Comisión, una serie de vertederos españoles siguen funcionando tras la fecha límite de 2009 en infracción de la Directiva, por lo cual se ha enviado a España una carta de emplazamiento.
Tras evaluar la respuesta de las autoridades españolas, la Comisión ha llegado a la conclusión de que, a pesar de ciertos progresos, algunos de los vertederos aún no han sido cerrados ni puestos en conformidad con la Directiva. Por tanto, la Comisión envía ahora un dictamen motivado a España (segunda etapa del procedimiento de infracción de la UE) y le da dos meses para responder.